Introducción a la nutriterapia
“Somos lo que comemos”. Esta es una de las frases hechas que más se suele remarcar cuando hablamos sobre nutriterapia. No lo hacemos porque sea una obvia verdad, sino por ser una de esas frases que, de tanto repetirse, parece haber perdido su significado.
Por supuesto que somos lo que comemos. Mediante la nutrición nuestra bioquímica se mantiene activa, cambia, se potencia en negativo o positivo.
Aunque a muchos se lo pueda parecer, el concepto de nutriterapia no es para nada nuevo ni moderno. Fue Hipócrates, filósofo precursor de la medicina nacido en el año 460 a.C. y que vivió nada menos que 107 años, quién enuncio la famosa frase: “que tu alimento sea tu medicina, que tu medicina sea tu alimento”.
Es por tanto una cultura ancestral que cada vez tiene más peso y respaldo científico y que, estoy seguro, en pocos años tendrá un papel importantísimo en el concepto de bienestar y de salud de toda la población occidental o industrializada.
Durante muchos años esta vertiente de la ciencia o de la cultura se ha menospreciado (sobre todo durante los últimos siglos) pero poco a poco se va haciendo hueco en el conocimiento científico occidental. Esto se debe, en parte, al desarrollo tecnológico que hace posible medir e interrelacionar parámetros de una manera que era imposible hace pocos años.
Muchos son los ejemplos que podemos dar de los pioneros en nutriterapia en el continente europeo. Algunos de los más destacables de nuestra época pueden ser la Dra. Catherine Kousmin, o el Dr. Seignalet.
EN QUE CONSISTE LA NUTRITERAPIA:
El enfoque de esta disciplina contempla la importancia por igual de cantidad y calidad de alimento. En las últimas décadas se ha dado una gran importancia a los macronutrientes y las calorías que estos representan en nuestra dieta. Esto ha creado una tendencia basada en el control sobre la cantidad de alimentos que ingerimos, desbancando a un segundo plano la calidad de los mismos.
El aporte correcto de sustancias imprescindibles para la vida, como son las vitaminas y los oligoelementos (minerales), es uno de los pilares fundamentales de la nutriterapia. Ha de resaltarse que la cantidad diaria recomendada o CDR no ha de tomarse como el valor óptimo de ingesta de los nutrientes, sino que se trata del aporte mínimo de ciertas sustancias para que el organismo no desarrolle una enfermedad por carencia de las mismas. Si nos ajustamos a los mínimos, podemos caer en subcarencias de dichos micronutrientes en situaciones estresantes para el organismo creando un desajuste químico que puede conducir a la enfermedad o al malestar.
El cuidado de las bacterias simbiontes de nuestro tracto digestivo también resulta fundamental. Por lo que el cuidado de la flora intestinal, así como de la pared intestinal, son otras de las bases de este concepto de nutrición.
También ha de observarse que el correcto balance de los diferentes tipos de ácidos grasos, así como de los aminoácidos (unidades químicas que componen las proteínas) es de vital importancia para el correcto funcionamiento de nuestro organismo.
Tan importante como la calidad de los nutrientes es la forma de cocinarlos, ya que de hacerlo de la manera incorrecta (algo muy común) un alimento puede pasar de ser beneficioso a inocuo o perjudicial.
Para poder controlar estos y otros muchos factores, ha de realizarse una profunda anamnesis y valoración del paciente. Una vez recabados todos los datos se procede a crear un plan nutricional ajustado a las necesidades de la persona. Dicho plan será cambiante y evolucionará según lo haga el paciente.
Cuando el profesional considere que la alimentación no es suficiente para cubrir las necesidades de ciertas sustancias se incluirá suplementación dietética. En ningún caso estamos hablando de administración de fármacos y, por supuesto, siempre se atenderá a posibles interacciones negativas (aunque pocas e improbables) entre el plan nutricional y el tratamiento farmacológico que este siguiendo el paciente.
Por tanto si optamos por esta vía debemos ponernos en manos de profesionales con un profundo conocimiento sobre fisiopatología y nutrición.
Es común encontrar pacientes que llegan a consulta pensando que para solucionar un problema determinado se les va a recomendar tomar un único alimento o suplemento. La nutriterapia no funciona así. Busca soluciones complejas a problemas complejos. Además al no usar fármacos y buscar acabar en lo posible con el origen del problema el tiempo de tratamiento suele ser relativamente prolongado. Ni que decir tiene que parte de la solución del problema residirá en conseguir que la persona abandone los hábitos que le llevaron a la situación de enfermedad.
CAMPOS DE APLICACIÓN DE LA NUTRITERAPIA:
En nuestra opinión este concepto debería aplicarse como método complementario de cualquier persona enferma o simplemente para quien quiera mantener su salud. Es más que evidente que un correcto tratamiento nutricional puede mejorar la salud de las personas, incluso potencia los efectos del tratamiento farmacológico indicado por un equipo médico.
Especial mención merecen las personas que padecen de estrés crónico. Se han demostrado fehacientemente los muchos y graves daños que genera el estrés, así como un correcto abordaje nutricional puede prevenir desarrollar enfermedades producidas por el mismo. Insomnio, depresión, amenorrea, diabetes tipo 2 y un largo etcétera de problemas son provocados por el estrés.
No se me ocurre un contexto en el que un correcto tratamiento nutricional no ayude al organismo. Es importante entender que no es necesario padecer ninguna enfermedad para optar por el uso de la nutriterapia. Signos como molestias digestivas, estrés, anomalías en la piel, falta de sueño reparador, o cambios en el humor o la conducta pueden estar dándonos pistas de que nuestro organismo está enfrentándose un cuadro bioquímico adverso.
Hemos de entender que la prevención de la enfermedad es la mejor medicina.
Vamos a citar solo algunos ejemplos en los que la nutriterapia ha demostrado científicamente su utilidad, para que el lector comprenda sus posibles aplicaciones:
COMPLEMENTANDO A LA MEDICINA:
ONCOLOGÍA:
Existen infinidad de nutrientes que pueden ingerirse con el fin de mejorar la calidad de vida del paciente oncológico e incluso tienen efectos beneficiosos para el proceso de curación de su enfermedad.
Podríamos destacar:
- ALKYLGLYCEROL: Se ha estudiado en modelos animales, in vitro y en humanos están desarrollándose estudios. Tienen efecto anti-angiogénico, se acumulan de 10 a 100 veces más en células tumorales que en células sanas, estimula el sistema inmune, sobre todo a las células encargadas de combatir las células cancerosas. . Además Los alkilglyceroles pueden agruparse en vesículas (algosomas) y trasportar medicamentos que superen la barrera hematoencefálica, este es de especial importancia en los tumores intracraneales. Incluso se ha demostrado su acción anti fúngica, antiviral y antibacteriana, por lo que su aplicación a nivel de prevención es interesante.
- CURCUMINA Y PIPERINA: A su efecto angiogénico se le suma la capacidad de activar la apoptosis (muerte celular) en células cancerosas. Especialmente destacable su efectividad en el cáncer de mama.
NEUROLOGÍA:
SULFORAFANO: presente en las crucíferas en general y especialmente en el brócoli, tiene efectos neuroprotectores, antioxidantes, antiinflamatorios y anticancerígenos. Existen varias y productivas líneas de investigación que avalan su uso terapéutico, como en algunos casos de herpes o enfermedades degenerativas del sistema nervioso.
ANTIOXIDANTES: Muchas revisiones bibliográficas confirman la eficacia de ciertos antioxidantes para mejorar la sintomatología en enfermedades degenerativas como el Alzheimer.
GINECOLOGÍA::
Desde la nutrición pueden abordarse problemas como el síndrome premenstrual, algunos signos de la menopausia, la falta de regularidad en la regla o incluso las candidiasis o infecciones recurrentes en órganos sexuales.
La regulación de las hormonas sexuales se encuentra íntimamente ligada con la metabolización de diferentes tipos de ácidos grasos e incluso con la producción de ciertas sustancias por parte de la flora intestinal (colon descendente). El hígado juega un papel fundamental en este proceso, por lo que una disfunción del mismo (no tiene por qué ser una enfermedad hepática) también puede alterar gravemente el ciclo hormonal de la mujer.
Vitamina B6, magnesio: ayuda a mejorar los síntomas del síndrome premenstrual. También se relaciona con algunos síntomas de la menopausia.
INMUNOLOGIA:
El cuidado de la pared intestinal y de la flora intestinal juegan un papel clave. Es por lo que se hace importante crear una dieta que no incluya alimentos que activen una respuesta inmunológica no deseada a la par que hemos de incluir sustancias que ayuden al mantenimiento o regeneración de la pared intestinal.
Correcciones alimentarias como la restricción de proteínas procedentes del trigo pueden prevenir enfermedades autoinmunes e incluso mejorar los síntomas de los que las padecen.
Se conoce que aportes óptimos de vitaminas A, B, C, D y E junto con glutamina, zinc, magnesio y hierro pueden mejorar considerablemente el funcionamientos del sistema inmune. Existen muchas otras combinaciones de micronutrientes para estimularlo.
FISIOTERAPIA:
Muchos son los casos de pacientes de fisioterapia que pueden verse beneficiados por la nutriterapia. El control del pH de la matriz extracelular afecta al dolor articular, la pérdida de masa muscular tras una lesión o por una operación puede evitarse en gran medida e incluso se puede ayudar a regular la respuesta inflamatoria evitando dosis altas de antiinflamatorios.
Vitamina C: esta molécula es inmensamente activa en nuestro organismo. Se ha llegado a correlacionar estados de carencia o subcarencias de la misma en dolores articulares que no respondían a ningún otro tipo de tratamiento.
OTROS CAMPOS:
- Actividad física orientada a la salud.
- Rendimiento deportivo.
- Psiquiatría.
- Dermatología.
- Un largo etcétera.
Bibliografía:
- Pedrono F1, Martin B, Leduc C, Le Lan J, Saïag B, Legrand P, Moulinoux JP, Legrand AB.Natural alkylglycerols restrain growth and metastasis of grafted tumors in mice. Nutr Cancer. 2004;48(1):64-9.
- Alkylglycerol vesicles (Algosomes).D. Gopinath, D. Ravi, B.R. Rao, S.S. Apte *, D. Rambhau.: International Journal of Pharmaceutics 246 (2002) 187/197
- Cellular Effect of Curcumin and Citral Combination on Breast Cancer Cells: Induction of Apoptosis and Cell Cycle Arrest. Patel PB, Thakkar VR. Patel JS.. Breast Cancer. 2015 Sep; 18(3):225-34. doi: 10.4048/jbc.2015.18.3.225. Epub 2015 Sep 24.
- Modulation of Experimental Herpes Encephalitis-Associated Neurotoxicity through Sulforaphane Treatment Schachtele SJ, Hu S, Lokensgard JR (2012). PLoS ONE 7(4): e36216. doi:10.1371/journal.pone.0036216
- Musculoskeletal manifestations of scurvy. Fain O. Joint Bone Spine. 2005 Mar;72(2):124-8. Review.
- Stress and disorders of the stress system. Chrousos, G.P. Nature Reviews Endocrinology. 5, 374-381, 2009.
- Gut microbiota and the immune system: an intimate partnership in health and disease Iebba V, Nicoletti M, Schippa S. Int J Immunopathol Pharmacol. 2012 Oct-Dec;25(4):823-33
- Herbal treatments for alleviating premenstrual symptoms: a systematic review. Dante G, Facchinetti F. J Psychosom Obstet Gynaecol. 2011 Mar;32(1):42-51
- Vitamin B6 in the treatment of premenstrual syndrome–a review.Kleijnen J, Ter Riet G, Knipschild P. Br J Obstet Gynaecol . 1990;97:847 – 852
- Gut-residing segmented filamentous bacteria drive autoimmune arthritis via T helper 17 cells. Wu HJ, Ivanov II, Darce J, Hattori K, Shima T, Umesaki Y, Littman DR, Benoist C, Mathis D. Immunity. 2010 Jun 25;32(6):815-27.!
Escrito por: Abraham Carlé Calo, Experto en micro nutrición y actividad física para personas con patologías.
Deja tu comentario